Corre, corre, corre... Llega agitado, eufórico, corre hasta encontrar a mami.
NIÑO: Mami, mami, ¿puedo tener un perrito?
Mami lo mira, linda.
MAMI: ¡Ay hijito, no hay espacio para ti y va a ver espacio para un perrito!
El niño la mira suplicante.
MAMI: ¡No, no, no! ¡Nada de perritos!
El niño resignado se retira.
DOS MESES DESPUÉS.
Mami, linda, va a ver al niño.
MAMI: ¡Hijito, hijito, vas a tener un hermanito!
El niño la mira curioso.
MAMI: ¡Va a haber un bebé en casa hijito, tu hermanito!
NIÑO: ¡Hermanito, qué hermanito! ¡¿No hay espacio para mi perro y tú vas a traer a un bebé?! ¡No, nada de bebés!
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